miércoles, junio 22, 2005

Shhh...

Soy repetitiva, lo sé, pero quiero recordarme una vez más
que el pasado es pasado.
Que no vas a volver, que lo vivido quedó allá, en aquel tiempo.
Aquel tiempo en el que supimos inventarnos dos fantasías,
y pocas promesas.
Aquel tiempo en el que yo no era yo y vos no eras vos.
Yo era tuya, vos eras mío, pero sin saberlo...
Aquel tiempo en el que fuimos felices con nada.
Aquel tiempo de secretos, complicidad y miradas suspendidas en el aire.
Aquel tiempo en el que no existía nadie más que nosotros dos.
Aquel tiempo en el que todavía no éramos responsables,
no teníamos obligaciones, no rendíamos cuentas a nadie.
Aquel tiempo en el que nos divertíamos con poco
y me conformaba con menos.

Sé que aquel tiempo nunca existió,
sé que es un invento mío, sé que nunca fuimos vos y yo.
Pero no me lo digas, no me robes el pasado,
no me quites la alegría de creer
que alguna vez supe ser feliz a tu lado.

jueves, junio 16, 2005

Hoy

Hoy la tristeza lleva tu nombre, lleva tu rostro, lleva tu sonrisa.
Hoy tu desamor hiela más que la ola polar que amenaza a la ciudad.
Hoy tu silencio, tu indiferencia cortan más que el cristal, más que mis huesos.
Hoy el sol sale sin tu mirada, sin tu calor, sin tu abrazo.
Hoy me hundo en el oceáno de infinitas palabras que no dijimos, que no diremos.
Hoy duele respirar, porque no respiro tu aire.
Duele pensar, porque sólo pienso en vos.
Duele cantar, porque no cantamos juntos.
Duele caminar, porque no estás a mi lado.
Duele vivir, porque vivis sin mí.
Hoy no es mi día, no es nuestro tiempo, no abrigo esperanzas.
Hoy sólo tengo tu desabrazo y tu silencio. Distancias. Vacíos.
Hoy tu ausencia llena mi vida.

lunes, junio 13, 2005

Nada

Nada.
Silencio.
Momento tenso.
Discusiones mudas.
Reproche en la mirada.
Respuestas nunca dichas.
Errores, muchos y repetidos.
Los mismos de siempre, una vez más.
Mis caprichos, mi insistencia.
Gestos de fingida frialdad.
Reacciones exageradas.
Reconciliaciones mudas.
Perdón en silencio.
Más silencio.
Vacío.
Nada.

sábado, junio 04, 2005

Chau

La vida pasa y no sabemos por dónde, pero lo cierto es que los minutos, las horas, los días, los meses y los años se nos escapan. Se van, pasan, se escurren a través de nuestras manos como si fueran millones de pequeños granitos de arena. Pasa el tiempo, giran las agujas de los relojes, perdemos oportunidades, desaprovechamos gestos y subestimamos compañías...

Rechazamos manos amigas,
cerramos las puertas a nuevos amores,
echamos a los amores conocidos,
levantamos paredes,
derribamos puentes
y nos vamos aislando cada día más.

Ya no busco como antes la alegría en cada mirada,
ya no espero encontrar sonrisas en tu ventana,
ya no paso por tu casa, ya no te busco adentro.
Ya no.
No puedo, no debo, no querría hacerlo.
No toleraría buscarte y no encontrarte,
sonreírte y no verme reflejada en tu sonrisa,
cantarte mi vida y no escucharte hacer las segundas voces.
No podría.
Tengo que guardar mi sonrisa en el bolsillo,
olvidarme de todo y mirar para otro lado.
Tengo que dejarte ir, tengo que borrar todo.
Chau.