La vida pasa, es cierto, pero no sé muy bien por dónde. Lo que sí sé es que los minutos, las horas, los días, los meses y los años se me van escurriendo entre los dedos, como si fueran millones y millones de pequeños granitos de arena. Y en medio de la vorágine de estos años que pasan como si fueran días, una trata de ir viviendo un poquito, de aprender algo, de encontrarse con otros. Eso no me cuesta tanto.
Lo que más me cuesta es aceptar cuando una relación termina.
Cuando una amistad ya no es tal,
cuando un amor se tornó imposible,
cuando un vínculo ya no puede ser sanado,
cuando estar con el otro implica abandonarme a mí misma.
Saber irme a tiempo. Eso sí que no lo sé hacer.
Hoy sé que no me hace bien seguir acá, parada, como si nada.
Sé que cada minuto que vuela en ese frenético tic-tac hace más difíciles las cosas.
Sé que esperando, esperándote, sólo voy a frenarme cada día más,
y el tiempo, ya lo dije, no espera ni avisa.
5 comentarios:
María, no sabés que identificada me he sentido con este texto, al menos hoy...
Hola Mery, ademas de compartir el nombre, comparto tambien tu estado de animo, es como si me mirara en tu mismo espejo, y te cocmprendo muy bien,, es muy duro, pero la vida es asi y todo esto que estamos pasando, pasara, y nos hara mas fuertes. un beso de arcoiris,
Con tu permido, tomere tu texto, lo modificare para adaptarlo a mi situacion, y lo publicare, ponienco claro esta, su origen. un beso de arcoiris.
Hay cosas de la vida que nos cuesta mas aprender.
Que un vínculo no pueda ser sanado- me quedó girando en la mente esa idea. Imagino todo el sentimiento compartido con otra persona, destrozado, echo un bollo tirado en algun ricón, doliendo.
No se porque pasan esas cosas. Quizas la vida nos irrumpe de ese modo para que notemos que hay muchisimas otras cosas dando vuelta, algo asi como hacernos ver de una manera un tanto cruda que ademas de un árbol, hay todo un bosque.
Yo tambien suelo quedarme prendida a esas despedidas que nunca pude formular.
Pero a veces creo que es como dice Johansen, y no quiero pasar la vida, sin que la vida pase a través de mi.
/viste que hay gente esperando que actualices el blog!! =)
Yo tambien me quede pensando en que un vínculo no pueda ser sanado. Comparto esto que escribiste Mery. Duele ver como las relaciones se van desintegrando, el olvido, que el otro siga normamente su camino sin importancia alguna. Y muchas veces esto atenta contra nosotros mismos, nos consideramos culpables de todo, nos cargamos mochilas tan pesadas que nos dificultan el paso para seguir, pero eso no esta bueno. Las experiencias nos marcan muchisimo, en nuestra forma de pensar y de actuar. Pero lo que no mata fortalece, dicen. No te quedes como si nada, paralizada, la vida sigue ! y queda mucho por andar. Esperar, con esperanza siempre, pero que esa espera no te estanque, al contrario, que se tu motivación para seguir y seguir con ánimo y convicción. Todo tiene sus frutos, a corto o a largo plazo, pero todo llega ! confiá. Esa es mi motivación también.
Un abrazo reina :)
Publicar un comentario