martes, noviembre 21, 2006

Abrazo y desabrazo

Escupir palabras y más palabras
sacarme de encima tantas ganas de todo
tanta sed de nada
dejar de sentir, dejar de extrañar
dejar de abrazar el vacío
dejar de soñar, de inventar, de desear.
Hoy quiero arrancarme el corazón y que ya no sienta.
O tal vez es más bien un problema de cabeza,
necesito que deje de pensar
o al menos que deje de meterse con los sentimientos.

Necesito tan poco y me cuesta tanto encontrarlo.

Necesito que por una vez me escuches
y veas más allá de lo que te digo,
que entiendas que si me callo es por miedo
que si no hablo es porque tengo demasiado para decir
que si te digo que estoy bien es porque no me animo a ser sincera.
Necesito que escuches más de lo que digo.
Necesito que me abraces
sólo por hoy,
necesito que me abraces,
y perderme en tus brazos,
y encontrarme en el abrazo.

domingo, octubre 22, 2006

Silencio y miedo

Espero y desespero
tejo
sueños, ilusiones, conjeturas
de los nudos que me quedan en la garganta,
en el alma, en el vientre, en la cintura
desato y tejo
sueño, espero y desespero.

Acordes mudos, palabras sin letras, gestos y miradas
palabras que definen y guardan misterios
palabras que se esconden
lo no dicho que obra más allá de los verbos
otra vez mis manos, otra vez tus manos
otra vez silencio
otra vez callo y silencio lo más mío
otra vez dos velas que se miran a los ojos
se derriten, acercan, vinculan,
conectan, comparten, integran
se confunden? se co-funden?

Y otra vez el miedo
miedo a equivocarme, a que te equivoques,
miedo a mí, miedo a vos,
silencio y miedo al silencio
miedo a no aprender a hablar
miedo a callar.

miércoles, septiembre 13, 2006

Septiembre

El 21 de septiembre empieza la primavera,
es decir que tres cuartas partes de ese mes son del invierno,
y sin embargo septiembre es primavera.

Porque septiembre es un mes robado.
Robado al invierno, robado al frío, al viento,
robado al miedo, a la gris rutina, a la soledad.

Septiembre es un mes robado para ser vivido
para ser exprimido y disfrutado,
es un mes robado para amar, amarse y ser amado.

Septiembre es un mes que le robamos a la tristeza,
es un mes que le robo a tanta certeza en contra,
es un mes que le robo a tu desabrazo y tu indiferencia.

Si a Sabina le habían robado el mes de Abril,
sepan que yo me robo para mí el mes de Septiembre.
Septiembre es mío y tuyo, es de nuestras manos,
es de nuestros labios, de tus ojos, de mi cuerpo.
Septiembre es nuestro y punto.

Ya vendrán Octubre, Noviembre y Diciembre,
ya vendrán el verano y su seguidor.
Ya volverá el invierno con todas sus fuerzas.

Pero hoy, aunque sea por un mes,
le robé al frío un puñado de sueños e ilusiones.
Me robé un mes y lo pienso aprovechar,
aunque después me lo hagan devolver con intereses.

viernes, agosto 25, 2006

Poder, querer y deber

El puedo, el quiero y el debo se entrelazan siempre de mil maneras distintas. Todo lo puedo (o casi todo). Sólo algunas cosas quiero, y son justamente las que no debo. Nunca se juntan las tres. O pocas veces. Pocas cosas son las que puedo, quiero y debo a la vez.

Y por supuesto que me refiero a Vos. A tu risa, a tus ojos, a tu boca, a tus manos. Por supuesto que me refiero a perderme en tus pupilas y en tus oídos, a esconderme en un rincón de tus ganas, en un cajón de tu memoria (alguno que abras seguido, de ser posible).

Pero no me refiero sólo a eso, no me refiero sólo a Vos. Hay otras cosas que quiero pero no puedo, o puedo pero no debo. ¡Ni hablar de lo que debo pero no quiero! Son muchas más que Vos. Tengo vida aparte de la que me llena cuando te tengo enfrente. Tengo más luz que la que irradio cuando me hablas, cuando me decís. Tengo más sangre que la que me recorre tan precipitadamente cuando me mirás.

Aunque a veces no parezca,
tengo mucho más corazón que el que Vos ocupas.

martes, agosto 22, 2006

Aire de jazmín

Hay algo que me invade, me inunda, me habita.
Una cierta calidez me recorre bien adentro, me llena.
Y tal vez es sólo aire,
tal vez todavía es vacío que está por llenarse.
Pero es una brisa cálida, es un viento de verano
que trae aromas de jazmín y azahar.
Es aire que trae mucho de esperanza,
aire que viene de río arriba,
aire que sabe las aguas que vendrán.
Hoy no sé cómo me invadió un aire de verano,
hoy no sé cómo me dejé habitar,
hoy no sé cómo ni por qué
me nació sonreír.

lunes, agosto 07, 2006

Palabras y lluvia

"Las palabras no sólo definen, hay canciones que guardan misterios."

Creo que las palabras, el lenguaje, nos sirve para comunicarnos, pero también construye paredes a la par que tiende puentes. Creo que hay palabras que todos entendemos, y hay otras que todos creemos entender. Hay palabras que interpretamos así, aun cuando el otro las haya querido decir asá. Creo que no siempre compartimos los mismos significados, no siempre implicamos lo mismo con lo que decimos. Pocos sabrán con certeza de qué hablamos cuando hablamos.

Y ni hablar de los gestos!! Tantas veces malinterpretamos un guiño, una sonrisa, una caricia o su ausencia. Pienso en todas las veces que me serví de gestos y señales para construir castillos de arena, y ni quiero pensar en los ladrillos que me tiraron y no supe ver. Pienso en los encuentros azarosos y en los desencuentros planeados. Pienso en las barreras que imaginamos, y en las indiferencias que nos inventamos.

Hoy llueve, y yo sigo buscando las palabras que no me terminan de salir. Sigo buscando el modo de decir esa sonrisa, de nombrar esa voz, de ponerle lenguaje a tanto que lucha dentro mío y hoy no puede salir. Espero encontrar las palabras. Pronto. Porque si no, mi cuerpo seguirá hablando por mí. Mis gestos, mis sonrisas, mi hilo de voz y mis manos. Mis valientes y traicioneras manos, que tantas veces han tomado la posta del lenguaje y han sabido hablar lo que yo no. Espero, sin embargo, que no las escuches. Ni a ellas ni a mí. Y es que ya no sé qué quiero, ni si te quiero. Ya no sé qué ganas son estas que me llenan cabeza y corazón, alma y voluntad. Ya sé poco. Tal vez hablé demasiado y me perdí en mis propias palabras. Sólo sé que hoy llueve y me invaden unas locas ganas de perderme en tus palabras, de malinterpretar tus gestos y de cometer una imprudencia. Definitivamente, la lluvia me afecta. Más de lo que pensaba. Me afectan la lluvia y tus palabras. La lluvia y tus gestos. Vos.

sábado, junio 17, 2006

Viejas heridas

Estos días de lluvia, tantos martes 13 en apenas una semana,
tanto recordar, tanto relatar, tanto revivir.
Tanto hurgar en heridas que parecen cerradas,
tanto revisar, machacar y especular.
Duele. Duele. Duele muchísimo.

Duele no cerrar heridas viejas,
duele verlas reabrirse con el mismo y punzante dolor,
parecen recién abiertas, y hasta vemos el filo que hirió.
Siempre los mismos fantasmas que lastiman,
que hacen desangrar.
Y hoy no encuentro conjuros ni dientes de ajo ni cruces que los alejen
¿o eso era para los vampiros?
Da igual, hoy no encuentro modos de alejarme de vos.
De alejar tu fantasma, tu espacio, tu respiración.
De sacarte de mis ganas y mi corazón
de desalojarte de una vez y para siempre.
Hoy no encuentro el modo
quizas podamos encontrarlo de a dos.

lunes, mayo 29, 2006

Sinsentido

Como esos bazares de todo por dos pesos
que en la vidriera pregonan ofertas que nadie quiere
que regalan por monedas lo que ninguno necesita.
Como una toalla húmeda que nadie quiere usar
que ya ni seca ni limpia
y sólo ensucia lo que toca.
Como esos bares de mala muerte
en donde ya nadie nuevo entra a tomar
donde sólo van aquellos
que hace años buscan ahogarse
en los mismos vasos sin limpiar.
Sucia, vacía, desgastada y sin sentido.
Regalada, vulgar, sin dignidad.
Mendigando siquiera un trozo de verdad
un puñado de mentiras para soñar.

Como la suerte del que sólo tiene un poco de pan
como la tristeza del que amó y perdió
como la certeza de que no vendrás
como la verdad de que no me amarás.
Como la amargura de estar acá
sabiéndote ajeno, sabiéndote lejano
sabiéndote ignorado, sabiendo que no te sé.
Como la mentira de mis manos
con una ilusión que no sabe ser realidad.
Como saberte perdido
sin haberte tenido jamás.


(y sin embargo, Fito me dice:
"No creas que perdió sentido todo,
no dificultes la llegada del amor,
no hables de más, escucha el corazón
ese es el cable a tierra.")

miércoles, marzo 29, 2006

Divagues en el colectivo...

Hace un tiempo, en una larga charla de la cual este comentario es apenas un ínfimo extracto, una amiga me dijo: "Lo que pasa es que vos sos larga de conocer, es muy difícil entenderte, siento como que no termino más". La charla versaba acerca de mis múltiples defectos y errores, fue un sacar los trapitos al sol. El caso es que sí, soy difícil de entender, soy jodida, me enrosco sola y no sé desenroscarme. Soy vueltera. Cada cosa que haga tiene que tener sus buenas razones para ser llevada a cabo. Cada palabra que digo es esa palabra, y no todos los sinónimos que podría haber sido. Cada cosa que digo la pienso (a veces no tanto, en realidad), pero todo tiene una razón.

¿Es tan difícil encontrar alguien que me pueda entender? Conocer a alguien que entienda mis palabras, el por qué de cada una y el por qué no las otras. Alguien que entienda los chistes de los que me río, alguien que se ría con Dolina, alguien que disfrute lo que disfruto. ¿Habrá alguien capaz de conocerme, de entender lo que pienso, de leer mis gestos, mis ironías y mis torpezas? ¿Conoceré a alguien capaz de entender lo que siento y cómo siento? Y por qué me angustio y qué me desangustia?

Necesito alguien que sea capaz de desenmarañar los nudos y vueltas que tienen mi cabeza y corazón, alguien capaz de descifrarme, alguien a quien no le resulte tan "larga de conocer", tan inaccesible, tan indescifrable. Necesito alguien que no sólo sea capaz de eso, sino que también lo haga con gusto, que no lo sufra. Alguien que también lo disfrute y hasta le resulte placentero esto de conocereme. Y una cosa más, tiene que ser mutuo.

¿Hay alguien así o tan complicada soy? (Por favor no contesten...)

Sé que suena exigente, pero lo cierto es que después, en los hechos, no soy tan así. Se me aligera el corazón con poco, ya el sólo hecho de que alguien note mi existencia, me despierta. Una vez le comentaba a alguien que siento que paso desapercibida, que no me destaco, que no resalto. Y está bien, creo que no todos podemos brillar con luz propia, pero a veces me gustaría que me noten, que me vean. Por eso cuando alguien tiene algún gesto de complicidad conmigo, sin ningún motivo obvio o aparente, sonrío. Sonrío mucho.

sábado, enero 14, 2006

Cerca del amor

Una vez estuvo cerca del amor
lo entrevió, lo presintió, lo sospechó cercano.
Pero tuvo miedo, y el miedo la paralizó.
Y el amor se alejó.

Nunca llegó a verlo, ni sentirlo, ni tenerlo, ni vivirlo.
Por momentos llegó a sospechar que no era para ella esa alegría,
esa inmensidad, esa dicha, ese dolor, esa quemazón.

Un día se levantó sabiendo con total certeza
que no había nacido para el amor.
Que nunca lo encontraría, ni él a ella,
que nunca sentiría arder su pecho al amar y ser amada.
Que nunca soñaría despierta, que nunca sería soñada por otro.
Que nunca se escribiría ni una sola canción, ni un solo verso por ella.
Que nadie la extrañaría tanto, que nadie pensaría en ella por las noches.
Pensó que la soledad era lo máximo a lo que podía aspirar,
el resto, no era para ella.

Y no estuvo tan mal enfrentarse con esa verdad.
La tomó como un misterio personal que debía aceptar.
Así abrazó su soledad, su ensimismamiento
y caminó por siempre con el corazón bien cerrado
bajo llave y tres candados.

Por eso nunca pudo escuchar más que sus propios pasos.
Por eso nunca pudo ver quién la seguía.
Por eso se perdió de mil amores.
Por eso perdió al Amor.

domingo, enero 01, 2006

Año Nuevo

Empiezo otro año sin vos, otro año sin conocerte, otro año sin tenerte.
Otro año en que no sé dónde estás,
otro año en que no sé quién sos.
Pero el año recién empieza.
Y si bien hoy estoy sentada, en plena fiesta,
sé que el día que me mires no voy a parar de bailar.
Como recién epmieza, todavía tengo la esperanza de que en este año te encuentre, te conozca, me enamore. Me encuentres, me conozcas y te enamores.